Imágenes trucadas es lo que son. La única semejanza al cine que tiene es "el hombre con su cámara" como la película de Vertov, y algún efecto de cine antiguo. En el cine y documentales se desarrolla una historia en el tiempo y esto son planos de efectos de programas de diseño para ordenador, pegados sin ninguna continuidad. Exceso de desenfoques, montaje repetitivo, música monótona, iluminación forzada, modelado de arquitectura mal mostrada y naturaleza con movimientos de hojas en direcciones y cantidades irreales, elementos suspendidos y poco más. Intentar imitar el cine es muy difícil. Aunque estos programas suponen un recurso para cosas concretas. Hay algo muy bien puesto: la frase escrita de que la arquitectura es un arte. Aunque esta pieza no consigue engrandecer la arquitectura y supongo que es de lo que se trataba.
quién se cree esta tía? Roman es una eminencia de la visualización digital, esta lerda ha ido al cine a aplaudir películas sin saber que el trabajo de Roman está detrás de muchas de ellas, Silvia, desconoces el mérito de hacer arte digital, la maquina no hace el trabajo querida, simplemente lo calcula... me sorprende que no sepas ni de lo que estas hablando en tu propios comentarios, te ahogas en tu saliva tia! "Imagenes trucadas" me gustaría verte sentada frente a una computadora intentando generar algo similar y luego TRUCARLO como dices. "algun efecto de cine antiguo" coño tía no tienes ni la más mínima idea de la composición digital del color tanto así que le llamas efecto. Posteriormente hablas del cine y la documentación visual, te sugiero investigar un poco más acerca de este mini film digital, es el trabajo de UNA SOLA PERSONA a tra vés de más de un año de trabajo, posteriormente ganó un pemio de Cannes para tu total ignorancia. Vaya que ni tu sabrías componer las mismas cosas de als que tanto hablas! IGNORANTE!
Mañana te presto un par de cámaras para ver qué haces, chata. Te vas a consagrar como la nueva revelación del mundo cinematográfico: Silvia Martín Vázquez, LA KUBRICKA ESPANYOLA.
Silvia Martín Vázquez dice:
ResponderEliminarImágenes trucadas es lo que son. La única semejanza al cine que tiene es "el hombre con su cámara" como la película de Vertov, y algún efecto de cine antiguo. En el cine y documentales se desarrolla una historia en el tiempo y esto son planos de efectos de programas de diseño para ordenador, pegados sin ninguna continuidad. Exceso de desenfoques, montaje repetitivo, música monótona, iluminación forzada, modelado de arquitectura mal mostrada y naturaleza con movimientos de hojas en direcciones y cantidades irreales, elementos suspendidos y poco más. Intentar imitar el cine es muy difícil. Aunque estos programas suponen un recurso para cosas concretas. Hay algo muy bien puesto: la frase escrita de que la arquitectura es un arte. Aunque esta pieza no consigue engrandecer la arquitectura y supongo que es de lo que se trataba.
quién se cree esta tía? Roman es una eminencia de la visualización digital, esta lerda ha ido al cine a aplaudir películas sin saber que el trabajo de Roman está detrás de muchas de ellas, Silvia, desconoces el mérito de hacer arte digital, la maquina no hace el trabajo querida, simplemente lo calcula... me sorprende que no sepas ni de lo que estas hablando en tu propios comentarios, te ahogas en tu saliva tia!
Eliminar"Imagenes trucadas" me gustaría verte sentada frente a una computadora intentando generar algo similar y luego TRUCARLO como dices.
"algun efecto de cine antiguo" coño tía no tienes ni la más mínima idea de la composición digital del color tanto así que le llamas efecto.
Posteriormente hablas del cine y la documentación visual, te sugiero investigar un poco más acerca de este mini film digital, es el trabajo de UNA SOLA PERSONA a tra vés de más de un año de trabajo, posteriormente ganó un pemio de Cannes para tu total ignorancia.
Vaya que ni tu sabrías componer las mismas cosas de als que tanto hablas! IGNORANTE!
Mañana te presto un par de cámaras para ver qué haces, chata. Te vas a consagrar como la nueva revelación del mundo cinematográfico: Silvia Martín Vázquez, LA KUBRICKA ESPANYOLA.
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