El Cine como forma expresiva y estética

martes, 17 de febrero de 2009

Slumdog Millionaire, Danny Boyle, Loveleen Tandan, 2008

Tampoco en esta ocasión estoy de acueerdo con Vera. Debe ser cuestión de edad...
Me pregunto qué sucedería si a un director francés se le ocurriera hacer una película ambientada en la España del siglo XIX, que describiera la heterogeneidad cultural de entonces, la implantación de la corrupción en las estructuras políticas y administrativas y algunos detalles más de esos que hieren nuestra autovaloración histórica... Pues algo parecido sucede con Slumdog Millionaire. A Danny Boyle, reputado director británico (la India fue una colonia británica), que tiene en su curriculum títulos como Trianspotting y (1996) y 28 días después (2002) y que ha acreditado suficientemente su capacidad de mostrar lo más abyecto de la sociedad occidental, se le ha ocurrido hacer una película ambientada en la India, de la que nos muestra asimismo los aspectos más penosos... La miseria de las castas inferiores, la explotación de los niños, los conflictos sangrientos entre los distintos grupos religiosos, las costumbres hosteleras poco ortodoxas (rellenar botellas de agua mineral), la tortura policial y otras "menudencias" comparables determinan un telón de fondo sobre el que seguimos las vicisitudes de un concursante de televisión, que, a su vez, nos contará su atribulada vida...
Y viéndola, me acordé de Pablito Calvo en Marcelino pan y vino (Ladislao Vajda, 1956), de Joselito, de Marisol y, en general, de la retahíla de niños prodigio que habitaron en el cine español durante el franquismo, cuando el cine de niños pobres que al final se hacían ricos, alimentaba las frustraciones de una sociedad estéril de creatividad... Evidentemente, conocida la penuria estética de aquellas y la sofisticación de Boyle, no quiero decir que la película de Boyle sea comparable a aquellos engendros impresentables... ¿O sí? Francamente, no me gusta el cine de niños pobres y mucho menos las películas de niños pobres que, por la intervención divina, escapan de su destino gracias a un milagro... a un concurso de televisión, que casi es lo mismo. ¡Telecinco es grande y El Gran Hermano su profeta!
Lo mejor de la película: además de la sofisticación visual propia del "estilo" de Boyle, el ritmo narrativo, apoyado en las posibilidades de los niños para forzar la empatía del espectador y en un conjunto de penalidades especialmente escabrosas padecidas por los tres protagonistas (desarrollo de las posibilidades de los mecanismos de preprogramación genética). La fotografía es aceptable, aunque a mi juicio, sobran muchos encuadres oblicuos, que bien mesurados habría podido regular mejor el ritmo visual.
Lo peor: el guión, paradójicamente saturado de lugares comunes y situaciones increíbles, aderezadas por un cimiento maniqueo incompatible con lo que a mí me parece buen cine.
Si no estoy muy equivocado, es una película con gran potencial como espectáculo, pero poco propicia para obtener muchos premios de la Academia Norteamericana... por las implicaciones que ello tendría en el subcontinente indio y porque no creo que sea demasiado conveniente para los intereses que defiende enfatizar las poéticas fecales...

10 comentarios:

  1. Me estás dejando fatal.

    A quien pueda interesar... Yo veo las pelis en piloto automaticorrrrr.

    No como vos, que hacéis un análisis exhaustivo de cada peli.

    Digo exhaustivo, no objetivo. Porque a mí ni se me ocurrió pensar en Joselito ni Marisol...
    ;-)

    Quiero decir que para nada creo que la peli tenga implicaciones morales.

    Es viva, ágil y la vida del muchacho, que es una mierda, es vida... No sé. Creo que Boyle tiene la facilidad para sacar las cosas del mundo real y transformarlas en cuentos o en algo surreal... Me pasa un poco lo mismo con Neil Jordan... En sus pelis uno no se plantea: qué mierda es esto o lo otro. Hay que ver... No. Simplemente disfrutamos.

    Probablemente o quizás seguramente no sea una buena peli, pero me parece fresca y diferente. Divertida. Quizás sea cine de entretenimiento para colonos británicos. Yo qué sé.

    :-)

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  2. ¡Claro que no es objetivo! Estaría bueno... Ja, ja, ja; lo de cine para colonos británicos me ha gustado, aunque acaso fuera más propio cine de colonos británico. :=)

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  3. La película analizada globalmente no me ha gustado.

    El hilo conductor principal me parece flojo y excesivamente cutre, las historias intermedias son infinitamente más interesantes y "el amor" las devora y les resta importancia.

    La moraleja del destino, el azar y el amor me ha resultado hasta insultante.

    Ahora vayamos a lo bueno. Me ha parecido mucho mejor película que Benjamin Button, tiene buen ritmo, especialmente la primera mitad, y desde luego un montaje envidiable.
    El color es espectacular y la fotografía en ocasiones (panorámicas y vistas de pájaro) sobresaliente.
    La música también está a la altura.

    La utilización de niños me resulta moderada y no sensiblera, lo cual es de agradecer. Pero la película va flojeando cada vez más mientras avanza el metraje.
    El rollo de generar tensión trasladando el concurso de televisión al cine es un poco rastrero pero es efectivo.

    En fin, una película entretenida sin más, con contenido fuerte pero muy trivializado, y una visión de la India muy lejana y espectacular (momento final Bolywood).
    Aparte de recuperar "el final feliz", con todas sus terribles consecuencias morales en mi humilde opinión.

    Saludos.

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  4. Bueno chicos... Bueno Alp... creo que me debes una cena... Mierda!!!, lástima!!!! no aposté nada.

    Qué peli se ha llevado 8 (ocho) estatuillas...????

    Ja, ja, y requeteja.

    ;-PPP

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  5. Por cierto, se me ha olvidado... Ya que ha quedado demostrado que mi criterio es el que vale, ja, ja... Os recomiendo, encarecidamente, que veáis la última peli de Clint Eastwood. Yo, como viajo mucho, ya la he visto... pero se estrenará en España el 20 de Marzo creo. Contactad conmigo si necesitáis un billete para USA.

    Se llama Gran Torino y es genial. Sencillamente, genial.

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  6. Era de esperar, y lo prefiero a que haya sido Benjamin Button. Pero no puedes decir que la moraleja no es rancia y vieja a más no poder, increíble además, e ilusa para dar el toque final.

    ¡¡A la academia le encanta el maravilloso cine que nos transporta y nos aleja de la odiosa realidad!!
    ¡Vivan los clásicos!

    Ahora, hay oscars que son de coña, y el de mejor canción original... pero si tenía dos de tres nominaciones...

    El de edición estoy totalmente de acuerdo eso sí.

    En fin, ¿cuántas películas de final feliz con beso saldrán desde hoy?

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  7. A mi no me consiguió ni entretener del todo, muy forzado, muy obvio, no sé...
    El guión... Uff, los efectos Boyle no me van mucho tampoco. (Y si no graba de una vez Porno aka trainspotting2 le odiaré para siempre)
    Lo mejor, el chavalillo orejudo, el Carlos Sobera Hindú y el Score por parte de M.I.A
    Yo estos Oscars estaba con Harvey MIlk

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  8. Javi.

    Respecto a la moraleja... Creo recordar que una de las chorradas que dije en mi blog (o lo mismo dije otra cosa, vaya usted a saber), es que lo que más me gustaba de la peli es que no se entraba en juicios morales. Hay veces que uno puede ilustrar movidas chungas de la realidad (como por ejemplo lo hace Eastwood en su última y maravillosa película) sin caer en la típica lectura moral (en este caso sería la lógica amo siervo… que anotaba Enrique de las pelis españolas… “eres una piltrafa, pero si juegas a la bonoloto, lo mismo te haces rico”…). Boyle, o mejor dicho, el guionista Simón Beaufoy vá más allá y hace algo parecido a lo que montó con Full Monty.

    Y a mí, ese humor no exento de ironía, me gusta.

    http://aterrizaje-forzoso.blogspot.com/2009/02/life-less-ordinary-slumdog-millionaire.html

    Dicho esto, a saber, que no encuentro moraleja en la peli y que si así hubiese sido, no me hubiera gustado… voy al final. ¿Qué pasa con el bailoteo?... puro cachondeo. Nada más.

    Que hay que vender la BSO.

    Si dije en el blog (Alp) que me gustó la peli (lo cual no significa absolutamente nada) es porque me gusta ver cosas poco convencionales (y ya sabes lo que detesto a los modelnos superdiferentes y superoriginales). Por poco convencional quiero decir… diferente en la resolución, en cada paso, en cada plano… Me gusta que una peli no me cuente lo que espero, me gusta no poder adivinar cada pasito…Benjamín Button me parece muy convencional (en ese sentido. Aunque como peli, valga más que Slumdog, más pasta, más producción, más calidad quiero decir :O) Pero conste que críticos de la talla de Tomás Fernández Valenti (con quien jamás estoy de acuerdo) dicen que BB es maravillosísima y Slumdog una mierda. Así que, obviamente, tus juicios y los de Valenti serán razonables. Los míos son solamente intuitivos.

    Me gusta, además, eso que ya te comenté, o comenté en el blog, sobre los cuentos… Pero no cuentos como los de caperucita (ejemplo a la española, “La tonta del bote” de Lina Morgan, ejemplo a la inglesa, cualquier peli de Leslie Caron), que se utilizaban como sustento moral de la plebe, sino los cuentos que solamente cuentan historias fantásticas y te hacen sonreír e imaginar. No aquellos que ofrecen esperanzas. La fantasía nunca ha ofrecido esperanza alguna que no sea ella misma como recurso.

    No sé. A mí esta peli me parece totalmente increíble, como Trainspotting o Full Montly. Pero bueno, bien es cierto que me olvidaré rápidamente de ella. Es puro impacto.

    Yo, que ni soy crítica y si soy gran público (recuerda lo del automático) he vencido al azar (¡!!) y he adivinado qué peli iba a ganar. Jua, jua, y rejua. Quizás eso diga mucho sobre ella :-)

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  9. A mí me parece ésta mucho mejor que Benjamin Button, y la última de Eastwood me parece mala tal cual suena.
    Slumdog me resultó predecible y además a partir de la mitad de la película directamente no me interesó en absoluto.
    La historia de amor es insulsa y el argumento en general increíble (y no hablo de ficción sino de sacar al espectador de la pantalla).
    El baile del final queda gracioso pero quedaría mejor si no acabara con beso.

    En mi opinión le falta coherencia a toda la película, cosa que sí que tienen Full Monty y Trainspotting.

    Pero vamos, es una opinión sin más.

    Y como digo el montaje me gusta, y la coña de "no se puede grabar" me arrancó una sonrisa.

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  10. Vera, creo que no era muy dificil adivinar el resultado tal como se atisba el panorama cultural que estamos fomentando.No queda tan lejos lo que planteaba la pelicual "Idiocracy". Si no la conoces y te interesa, date una vuelta por youtube y mira los trailers.
    Los cuentos provenian de Oriente y " No se utilizaban para sustento moral de la plebe " tenía otras utilidades, enseñaba a los niños determinados valores, estaban llenos de simbolismos,y estimulaban las funciones de intuición, emociones y creatividad artística.

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