El Cine como forma expresiva y estética

miércoles, 31 de diciembre de 2008

Appaloosa, Ed Harris, 2008

Si mis datos no están equivocados, es la segunda película dirigida por Ed Harris y reconozco que me ha defraudado en ambas, acaso porque esperaba mayores logros de un actor excepcional. Sin embargo, ello no quiere decir que la película me haya parecido mala. No tiene el ritmo trepidante que puso Eastwood en Sin Perdón, pero como en ésta, Appaloosa nos habla de personas, de hombres, de mujeres, de dificil mitificación, en un todo poético (¿candoroso?), a mi juicio, muy eficaz para interesar al espectador capacitado para valorar la sencillez o, incluso, el ascetismo visual. Y sobre ella (sobre la de Eastwood), Ed Harris no se ha visto condicionado por su propia historia como actor y director y, por ello, acaso se haya movido con mayor libertad.
La fotografía me ha parecido particularmente buena, con encuadres excepcionales, sin rehusar las fórmulas consagradas por el uso. En algunas partes me ha recordado las mejores secuencias de Sergio Leone (Hasta que llegó su hora), por supuesto, sin rezagos de la estilización barroca propia del director italiano. Me ha gustado especialmente la manera de "explicar visualmente" la decisión final del personaje interpretado por Viggo Mortensen.
Lo mejor: la apuesta por un naturalismo (apoyado en una ambientación que parece impecable) que otorga una dimensión nueva al cine del Oeste. Tal parece que la industria norteamericana ha decidido olvidar el respaldo incondicional a la confección de una historia mítica demasiado sintonizada con la estructura económica y de valores sociales del presente. Los personajes , embrutecidos, están decisivamente condicionados por la precariedad del medio, por principios vitales elementales, por la dependencia del más fuerte... Los indios son pordioseros que se contentan con un caballo. Los revólveres, como en la de Eastwood, son armas sumamente imprecisas, cuya eficacia depende de la decisión y valor del tirador...
Una obra muy interesante, poco propicia para los amantes de las películas del oeste al uso, pero acaso muy adecuada para imaginar el camino que puede tomar el cine si no desea competir con los videojuegos...

Vicky Cristina Barcelona, Woody Allen, 2008

Por indicación de Heidi acepté -por el imperativo categórico de la amistad- ver la última película de Woody Allen, director admirado hasta que me consumió la riteración... Demasiados circunloquios para tan pocas ideas. Reconozco que él mismo supo sobreponerse a ese juicio compartido por muchos y durante los últimos años realizó algunas obras sorprendente y, en algún caso, hasta sobresalientes, por supuesto, dentro de una concepción cinematográfica muy fundada en el guión (salvo en las que contó con Gordon Willis: Annie Hall, Interiors, Manhattan...)
Para juzgar ésta sería importante conocer los objetivos... Porque, vista la película, no tengo claro ese extremo. No sé si es una película promocional de la ciudad de Barcelona u otra cosa... Si así fuera, si en realidad no hubiera pretendido sino filmar un macro-spot, reconozco un resultado magnífico, en especial si la promoción tenía por objeto convencer a las jóvenes norteamericanas. Si deseáis tener una experiencia que os cambie la vida, viajad a Barcelona: en un ambiente dominado por las obras de Gaudí y Miró, os liberaréis de vuestros estrechos prejuicios, descubriréis los componentes más recónditos de vuestra sexualidad... Os acostaréis con un pintor, un escritor, un escultor... un "artista", tendréis experiencias maravillosas y regresaréis a vuestro origen hortera sabiendo que la forma de vida americana no es la más adecuada para experimentar el placer, la felicidad... la vida. En suma, si se trata de un super-spot, la obra merecería una valoración muy positiva. Viéndola recordé aquello de "Qué bonita es Barcelona, perla del Mediterráneo..." aunque lo que aparece en la película no coincide con mis recuerdos, tal vez, porque las veces que he andado por allí además de buscar a Miró y a Gaudí, también me interesaron otras cosas y, en especial, sus gentes. Las lenguas viperinas dicen que le pagaron muy bien... Será cierto.
Pero si el objetivo era hacer una buena película, el juicio es radicalmente distinto. Tiene todas las virtudes y todos los defectos del cine más manido del realizador neoyorkino. Los elementos formales del guión me han parecido algo más flojos de lo habitual: los diálogos son aceptables, aunque las locuciones en off (al menos, en la versión doblada al castellano) son manifiestamente mejorables. Recurrir al narrador para sustanciar la linealidad de un relato cinematográfico es una fórmula denostada por los "puristas"; a mí me parece un recurso como cualquier otro... Si lo valoramos desde el resultado global, todo se simplifica. En Barry Lyndon, por ejemplo, la voz en off "funciona" muy bien; lo mismo podría decir de Starship Troopers... (no se irrite nadie por el ejemplo elegido) En este caso creo que es un solución muy forzada, porque es el sustento fundamental de la narración. Nunca como en esta ocasión será tan apropiado hablar del cine como "historia filmada".
La fotografía y el montaje son, como de costumbre, correctos, sin grandes alardes creativos. Las interpretaciones... La versión doblada al castellano no me ha gustado.
Lo más interesante aparece, a mi juicio, en algunos elementos de la historia, como la defensa de una sexualidad libre como fundamento de la relación interpersonal, la expresión emotiva y la creatividad; magnífica idea que se ha tratado en alguna otra ocasión, que para ajustarla a las circunstancias actuales requeriría una película, cuando menos, más ambiciosa... y, por consiguiente, un director con otros objetivos profesionales y estéticos. En este punto, el lector habrá comprendido por qué se me ocurrió mencionar a Paul Verhoeven....
Película sólo recomendable para los incondicionales de Woody Allen y los dos actores españoles incluidos en el reparto...

martes, 30 de diciembre de 2008

El Greco (Yannis Smaragdis, , 2007)

Hacer una película o escribir una novela sobre un personaje histórico exige una decisión preliminar: asumir las ventajas e inconvenientes del rigor o de la negación del rigor. Ambas fórmulas, a mi juicio, pueden ser “aceptables”, si el resultado final es bueno. Pero si el resultado es mediocre, esa decisión preliminar puede convertirse en un soporte de valoración muy peligroso.
En este caso, Yannis Smaragdis optó por partir de un relato novelado de Dimitris Siatopoulos que había utilizado a El Greco para ofrecer una reflexión sobre las relaciones entre el arte y “lo divino”, en el contexto de la Santa Inquisición. Probablemente, también habrá consultado el libro de Stefan Andres: El Greco pinta al Gran Inquisidor, pero entiendo que le preocupó muy poco aproximarse a la figura histórica de quien compuso El entierro del Conde de Orgaz.
No sabría valorar el resultado de la novela que otorgó fundamento al guión, pero el de la película es más que dudoso. Si la película tuviera en ritmo narrativo sólido; si el montaje fuera eficaz; si el guión fuera bueno; si las interpretaciones fueran convincentes... hubieran pasado desapercibidos los múltiples anacronismos y las “debilidades” perceptibles por quienes estén familiarizados con la pintura de El Greco y las circunstancias históricas de su momento.
Algunas ambientaciones son particularmente absurdas: se conduce a un personaje por el claustro de un monasterio; el grupo gira para acceder a lo acaso sea la sala capitular del Monasterio de Santes Creus y sin solución de continuidad aparece una sala de torturas de la Inquisición.
Es curioso, por ejemplo, que suceda la acción en Toledo y que apenas aparezca algún plano que nos sitúe físicamente en la ciudad del Tajo, habida cuenta lo concreta que es su fisonomía, de callejuelas quebradas, estrechas y empinadas; con el peculiar “aparejo toledano”, la supervaloración del ladrillo... Francamente, es difícil “creer” que la acción sucede en Toledo.
Del mismo modo, se nos presenta a un pintor que parece escapado de Montmatre, defendiendo unas prerrogativas de la creación artística que tienen muy poco que ver con la situación social y profesional de los pintores durante los siglos XVI y XVII. Y sin embargo, los fundamentos ideológicos del pintor (de la película) nos remiten a postulados ultraconservadores: el arte de la pintura, cuando lo ejerce un gran artista, puede hacer que resplandezca la Verdad y, por consiguiente, que las personas retratadas parezcan santos o diablos, según sea su alma. Recuerdo El retrato de Dorian Grey y, como de costumbre, las comparaciones son odiosas...
El enfrentamiento con la Santa Inquisición... “Tema” recurrente, que, sin embargo, planteado en las claves maniqueas de la película nada tiene que ver con los datos conocidos en ese sentido, infinitamente más complejos e interesantes. El retrato que espanta al Inquisidor General acaso pude entenderse hoy en sentido acerado, pero mucho me temo que con él sucede algo parecido a lo que ocurre con el retrato de Inocencio X (Velázquez). En ambos casos, deberíamos conocer el rostro que realmente tuvieron los personajes para saber hasta qué punto ambos pintores ofrecieron sendas imágenes críticas... Lo destacable en positivo: algunas tomas, la ambientación musical de Vangelis y algún otro detalle de menor entidad...

lunes, 29 de diciembre de 2008

Belle de jour

Por Raquel Espinar Plitt

En esta película de la última etapa de Buñuel, como en Eyes wide shut es imposible establecer la frontera entre las fantasías y la realidad, y precisamente en eso se basa su argumento. La imaginación de Sevérine, una mujer de la clase alta, de apariencia frívola y casada, acaba siempre en relatos dónde es maltratada por su marido y desconocidos, y en dónde el aspecto sexual cobra importancia en medio del contexto de agresión. La película nada es ese ambiente onírico de sus fantasías, estableciendo con ellas no sólo su etapa de prostituta, sino todo el argumento que le lleva a ella, haciendo inevitable mirar en principio toda la evolución narrativa con cierta incredulidad; Pero no por ello deja de ser acorde a la representación del personaje que intenta argumentar Buñuel.

Cuando vi hace tiempo la película por primera vez, no se me ocurrió pensar que ella era virgen, sobre todo teniendo en cuenta que llevan un año de casados. Realmente es difícil imaginarse un matrimonio que no mantienen relaciones, y menos todavía que nunca las han tenido. Este el primer punto que establece un contexto irreal, que forma parte de las fantasías de ella y les da un nuevo sentido. En estas fantasías, donde su sexualidad es explotada de una forma agresiva, la experiencia de lo sexual parte puramente de la imaginación, no como variación de algo ya conocido ni como añadidura a un juego sexual por el aburrimiento ante un acto ya automatizado en su relación. Este "aburrimiento" injustificado, una interpretación indemostrable que se asimila con un rechazo ante la conducta pasiva de su marido, ante la que responde también con pasividad y frialdad a la espera de un comportamiento que en su "realidad" no puede obtener, ya que entiende su sexualidad desde la sumisión. Esto sin embargo no representa para ella una frustración en un principio, al contrario de Albertine en Eyes wide shut, que la reconoce de alguna manera al contarle el sueño con sus fantasías sexuales insatisfechas a su marido. Ni tampoco parece darse cuenta de problema que supone limitar su sexualidad a la fantasía, pues se presenta como un juego en el que ella se pierde sin afectar a su relación conyugal. Hasta que su fantasía va cobrando forma "real".

Durante sus primeros días como Belle de jour Sevérine recibe a un cliente japonés que presenta uno de los elementos más significativos de la película. Lleva consigo una cajita que parece ser parte del ritual sexual. Él le enseña el contenido a Sevérine, pero sin mostrarlo al espectador. El propio Buñuel dijo sobre la famosa cajita que no pretendía meter algo concreto en su interior, sino permitir a la imaginación rellenar el hueco de información que la película no completa mediante la proyección, utilizando elementos del inconsciente del espectador. Es justo este juego el que pretende plantear Buñuel, relacionando el subconsciente con la cajita. Si esta se entiende con los contenidos del ello de Freud, en este precisamente se encontraría su sentido. La cajita contiene el ello, es su cofre. y es esto lo que Sevérine contempla, identificándose. El ruido inquietante al presentarla hace una idea del aspecto trastornador que representa. Lo oculto, la sombra... todo aquello que Freud repudia al inconsciente y lo esconde tras una represión ante lo más propio y extraño de la psique, en este caso la femenina. Lo inconsciente nos lleva de nuevo al tema del sueño, en el que está envuelto todo... lo onírico como contexto... mientras en Eyes wide shut lo inconsciente, el mundo de los sueños, el ello; se representa con una máscara Buñuel es mas directo: directamente lo encierra en una caja que no se muestra al espectador. Si las otras mujeres al contemplarlo pueden sentir repulsión (ante su propia psique, ante lo que ellas mismas son .....), Sevérine parece intrigada y satisfecha con el contenido, con descubrirlo. La liberación del cofre cerrado lleva la sublimación de Belle de jour, por una represión que ahora sí que implica la representación del ello. Sus actos, y el contenido de la cajita vienen a ser el mismo elemento y a tener el mismo significado. Ella guarda lo que guarda la caja, las necesidades inconcebibles como Sevérine... ella es la caja, y lo que encierra. Esta personificación trabaja en la misma forma que las personificaciones de Fellini, con sus mujeres representando puros conceptos intangibles.

Belle de jour es entonces la exteriorización exagerada de un aspecto que él entiende intrínseco en las mujeres, la personificación de lo que esconde la cajita. Parte de la idea que ya dijo Nietzsche "si vas con mujeres no olvides el látigo" pero acaba siendo bastante más radical. La necesidad de sumisión parte quizá del mismo punto que ciertas tendencias sexuales, no necesariamente agresivas o físicas como en sus fantasías, pero sí por ejemplo de la excitación ante la degradación y la humillación (Freud elaboró un estrecho vínculo entre la sexualidad y las tendencias masoquistas). "Si se produjera el hecho de que no pudieras soportar mi dominio y que vuestras cadenas sean demasiado pesadas, deberéis mataros : nunca os devolveré la libertad." Leopold de Sacher-Masoch

De todas formas, aunque empieza jugando con estas relaciones, luego, al establecer el lenguaje onírico y un desarrollo basado en la fantasía, la historia cobra otro matiz. Incluso cuando se presentan las situaciones teóricamente reales los elementos propios de los sueños siguen formando parte esencial del significado (acciones incomprensibles, contexto absurdo que aún así resulta obvio, reacciones sin sentido.. cosas que se escapan a la comprensión, hechos que requieren una explicación que permanece oculta... y a pesar de todo el conjunto adquiere sentido, como en los sueños). Igual que en Eyes wide shut, esta vez con un sobrenombre como máscara.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Sangre de mayo ¿Una película magistral?

Por fin, he visto Sangre de Mayo; gracias a la generosidad impagable de Telemadrid me he ahorrado unos euros... ¿O no?
Y debo advertir que mis prevenciones estaban totalmente infundadas, porque me ha parecido una película magistral, un jalón que determinará un antes y un después en la historia del cine español, acaso, la mejor comedia jamás rodada en toda la historia del cine del mundo mundial. Felicitaciones para el señor Garci y para su ilustre promotora.
Los acontecimientos descritos están dosificados magistralmente para que el espectador esté permanentemente atento a la pantalla, hasta la traca final en la que Goya, ambientado por los fandangos de Boccherini, "toma apuntes" de los fusilamientos, tal vez la secuencia cómica más extraordinaria que jamás he contemplado en pantalla alguna. Las películas de W, Wilder y "Teléfono Rojo" pasarán al olvido; es posible que hasta Viridiana, con su mordaz propuesta a medio camino entre el anticlericalismo y la comedia negra, deje su lugar a ésta.
La cámara se mueve con fluidez, según las circunstancias descritas en cada momento, combinando planos cortos con tomas largas, picados con contrapicado; en definitiva, un verdadero prodigio de creatividad cinematográfica. El montaje... ¡Por fin, podremos olvidarnos definitivamente de Sergei Mikhäilovitch Eisenstein! Desde hoy la referencia será José Luis Garci.
Debo reconocer -no todo ha de ser sobresaliente- que la fotografía ofrece algunos momentos flojos...
No así las secuencias de acción, que desplazarán al Guateque de Blake Edwards, en las referencias magistrales del cine cómico.
El derroche de patriotismo, con banderitas de guardarropía, es sencillamente sublime. La famosa secuencia de El fantasma de la libertad, aquella de "¡Vivan las caenas!" caerá de los palacios de Mnemósine...
Me ha encantado la ambientación escénica, con una iluminación que supera ampliamente los logros de Stanley Kubrick en Barry Lyndon, que estará retorciendose de envidia en su tumba. No es peor el vestuario dominguero de los protagonistas y figurantes, que me han recordado las "fiestas medievales" de Ayllón, donde muy probablemente habrán encontrado inspiración los acreditados documentalistas consultados por el director.
La interpretación acaso sea uno de los puntos débiles, porque algunos actores no llegan al nivel cómico general; no obstante, la mayoría nos harán olvidar a Chaplin, a Buster Keaton, a Peter Sellers, a Jerry Lewis y hasta a Gracita Morales.
La descripción de los usos y costumbres de la época produce tanta hilaridad, que por sí sola serviría para "tapar" los posibles e hipotéticos fallos de ritmo de la película. Y digo "posibles e hipotéticos" porque no he encontrado ninguna carencia importante en ese sentido. La historia fluye con situaciones perfectamente ligadas y de interés creciente; los diálogos son tan ingeniosos que no requieren truculencias de ese tipo. El espíritu de Pérez Galdós vive entre las "licencias" utilizadas por el guionista... Lo magino contemplando la película desde la eternidad... y seguro que también él se estará desmoronando de risa...
Los chistes visuales, que algunos podrían llamar "morcillas", son asimismo magistrales. Deseo destacar la retórica metafórica de las antiguas calles de Madrid, absolutamente limpias y planas, como corresponde a un urbanismo que es de ayer, pero que también es de hoy. Asimismo me ha encantado la imagen religiosa en la urna de plástico (¿o de vidrio?). Las tazas de cafetería actuales y algunos vasos de ¿Duralex?, igualmente determinan otra metáfora recurrente que comunica el presente y el pasado. Y otros mil detalles más del mismo cariz que sería prolijo mencionar.
Pero lo mejor, en la línea de las metáforas recurrentes que comunican el pasado con el presente, son las imágenes finales del Madrid actual, con ese "metro" que es envidia de los paisanos de Eisenstein), por la velocidad de los trenes, frente a la lentitud de los oscovitas (que se chinchen los rusos); con esas torres que elevan a la categoría de símbolo cultural la especulación inmobiliaria (acreditada en tiempos de Godoy, claro está); ese Palacio Real, que es espejo de otros palacios europeos, obviamente menos cualificados estéticamente...
Lo dicho, para morirse de risa, sobre todo, pensando en los 15 millones de euros que se podrían haber gastado en dotar hospitales...

domingo, 21 de diciembre de 2008

El intercambio, Clint Eastwood, 2008

Tiene gracia que quien fuera uno de los peores actores de la industria cinematográfica universal, culmine siendo uno de os mejores directores de la industria de Hollywood y, por añadidura, un actor de cierta reputación. Es obvio que la naturaleza humana y las teorías sencillas sintonizan mal. Desde que presentó Sin perdón (1992) nos tiene acostumbrados un tipo de cine de cualidades muy marcadas, que determinan un proceso de superación continua.
Son películas “sencillas”, bien realizadas, con escasas concesiones a las veleidades barrocas o virtuosas en lo visual, construidas desde guiones bien trabados, diseñados para que el espectador siga la acción con interés creciente, en las que es difícil destacar una secuencia entre las demás. Lo que destacan en las películas de Eastwood son las “situaciones” elegidas para substancias la “historia”, que se fundamente, por lo general, en la capacidad del actor para activar los sentimientos del espectador empleando sus recursos profesionales. Es, por consiguiente, un tipo de cine que presta poca atención a las posibilidades que tiene la imagen para condicionar las valoraciones emotivas que surgen en el espíritu del espectador.

En ese sentido, ´podríamos hablar de un cine “ascético”, que frente al de otros directores de planteamientos afines (Spielberg, sin ir más lejos), se distingue por la confección de guiones de extraordinario interés, que dejan poco margen al aburrimiento. En esa línea, El intercambio es, según mi criterio, la mejor película firmada por Eastwood . La historia es de gran interés objetivo y, por si ello fuera poco, su desarrollo es una magnífica lección de cómo mantener el interés del público sin ceder a fórmulas manidas, recurriendo casi siempre a soluciones eficaces y elegantes.
Los actores cumplen muy bien sus cometidos... incluso los niños, siempre difíciles de dirigir, resuelven acertadamente la situación
La ambientación histórica es muy buena, al igual que el vestuario y el resto de los factores técnicos...
En definitiva, una magnífica película, que me hace lamentarme porque este venerable profesional del cine no sea un poco más receptivo a las posibilidades de la imagen...

lunes, 15 de diciembre de 2008

Eyes Wide Shut o la fábula de los sueños

Por Clotilde J. Bandera Gallego

Puede que esta película de Kubrick hubiera pretendido ser la historia de los sueños, la fábula de algo que no consigue desvelar la realidad más intima, logrando hacer oscilar los mecanismos perceptivos del espectador, que termina recelando de su misma apreciación, provocándole la tensión de lo intermedio.
Sueño y realidad invierten sus lugares, sin importar en cual se esté en cada momento, porque en definitiva, siempre existen restos de los dos combinados. Al igual que la realidad no es real , podríamos decir que los sueños tampoco quedan relegados al campo exclusivo de lo onírico. Ambos se cruzan en un intento de ampliar sus límites para irrumpir en el espacio contrario. Porque inexplicablemente lo real se gesta en el ámbito de los sueños, sueño y realidad viven en simbiosis, precisándose recíprocamente para existir. Las secuencias de la fiesta ritual de las máscaras hace uso de todo ello.
Posiblemente, la intención de Kubrick fuera realizar un film que recogiera el mundo del psicoanálisis. Pero a pesar de todo, subsiste un ocultamiento de lo más obvio, aunque quizás exista en esa especie de lo que suponemos una logia, algo que se le niega al espectador. Entregas sexuales indiscriminadas con la sola mediación de una máscara que únicamente oculta el rostro pero no la identidad. Mascaras que conecta con el mundo oscuro y profundo de los instintos primitivos y que recuerda a esa idea de Bataille, la nueva forma del conocimiento basado
en la estética del erotismo, donde la belleza emana de las vehementes agitaciones.
Kubrick logra suavizar y estabilizar las imágenes mediante la técnica de Garret Brown, el steadycam, y así las escenas orgiásticas adquieren una singular sensualidad. El punto de vista se humanizara, pues el dispositivo parece como si se dejase llevar por el aura misterioso que los hechos conllevan. La cámara recorrerá pausadamente los rostros enmascarados de los asistentes a la vez que se oye el órgano acompañado de una letanía, creando una atmósfera especial que podría recordar a ritos ancestrales, ritos de liberación de las fuerzas instintivas, dejándonos ese eco lejano que queda suspendido en el tiempo.
Las escenas finales de la película malograran la idea de Kubrick “Si se explica lo que significan las cosas , estas dejan de tener sentido”

lunes, 8 de diciembre de 2008

Mister lonely, el rebaño de ovejas negras.

Por Marian Garrido Herrojo


Hace un año que vi ,posiblemente una de las películas que más me han impactado.
Harmony Korine vuelve al ruedo con una historia desgarradora, pero no en el sentido que nos tenía acostumbrados, esta vez todo tiene capas de almíbar que nos zambullen en un universo mágico, onírico...
Mister Lonely, clasificada erróneamente en casi todos los medios como comedia, no es precisamente un retrato de la felicidad, más bien lo contrario, una fábula donde quizás los elementos formales hagan de la historia un relato hilarante: Una comuna de imitadores de personajes famosos, pero con un transfondo tan profundamente poético y real al mismo tiempo, que a mi parecer hace de este film uno de los más acertados a la hora de digerir la metafísica humana.

Dividida en tres capítulos que toman su nombre de canciones de Michael Jackson (The man in the mirror, beat it y thriller) es precisamente la figura de éste, transmutada en la piel de Diego Luna (increíble interpretación) la que nos guía por los senderos del alma.
La elección de Jackon no es sólo estética, encarna sin duda el mensaje completo de la reinterpretación de la vida en todos los sentidos. Recordemos que él ha sido el humano más consciente de la evolución y las elecciones que ello conlleva; cambio de color de piel, de aspecto, complejo de Peter Pan extremo.. Y sin duda la metáfora perfecta para la inadaptación social que narra Mister Lonely.
El personaje de Luna, en algún momento decidió ser Michael, consciente de poder elegir como vivir su vida e incluso quien querer ser, seguramente la mejor opción si te recuerdas a ti mismo constantemente que no estas cómodo con quien eres. La idea de la inmortalidad es constante en la película, la preocupación del imitador con elegir la edad que queremos tener para siempre (al igual que el Jackson real) y de vivir en un mundo propio ajeno a los males sociales, de ralentizar la vida recluido en uno mismo.
Toda esta soledad parece haberse solventado con el encuentro fortuito de otra rara avis esta vez encarnando a Marilyn Monroe que le descubre la posibilidad de unirse a una comuna en las Highlands escocesas, donde "nadie envejece" formada completamente por imitadores. Sin duda el lugar idílico para sentirse cohesioando con un grupo y llevar a cabo tu sueños y esperanzas.

Este sitio, alejado de la realidad en todos los planos, al que llegan en barca, permite enmarcar la acción compositivamente en planos llenos de belleza e irrealidad, donde el colorido de los personajes resalta con el plomizo del paisaje. Un mundo ideal e irreal. El aislamiento meditado de estas personas en todos los niveles, es fundamental junto con la idea de pureza del alma, para entender más allá de una fachada surrealista; El desdoblamiento continuo de personalidad en los juegos infantiles, son la explicación de la inocencia al querer experimentar una vivencia propia por que hallas interesante la vida ajena.
Korine nos muestra un protagonista que lejos de estar atormentado muestra una dulce complaciencia con la diferencia que le ha tocado vivir y sufrir, una auto determinación de la marginad, de no empatizar con el mundo, de ser distinto: "es difícil reírse ,cuando no sabes qué le hace tanta gracia a la gente"
El contrapunto a la inocencia de Michael es sin duda Chaplin: marido de Marilyn, representa la faceta más humana de este singular grupo, mostrando cada uno de los defectos que nos caracterizan, siendo la desdichada Marilyn quien los sufre hasta el extremo de jugar el burlesco paralelismo de la malograda estrella, acuñando un "no se tarda tanto en morir, no tanto en lo que se tarda en vivir" que viene a ser lo que cantaba Morrysey con los Smiths en "the queen is dead"; Live is very long if youre lonely

Pero no adelantemos acontecimientos, pues el verdadero punto de inflexión y el acto de mayor carga simbólica es el acontecido con las ovejas;
Resulta que las pobres bestias son víctimas de una plaga, que traerá de vuelta a la realidad a la comuna.
Casi por castigo divino han de sacrificarlas a todas. Los sueños se rompen con el encontronazo de la muerte y la enfermedad, y una a una el rebaño de ovejas curiosamente negras excepto una, que protagoniza junto a Chaplin una lacónica despedida (¿Será que él es la única oveja blanca de la comuna?) son disparadas.

La prueba de fuego para esta micro sociedad onírica, llega con la presentación de un espectáculo en los que ellos vuelcan todas las ilusiones que les quedaban, y donde deben someterse al resto de personas ya que los impersonators "viven a través de otros para mantener vivo el espíritu de lo maravilloso", pero al levantar el telón de las esperanzas y los sueños, llega la decepción una vez más y para Michael la vuelta a París y al mundo real que se abre ante él inexplorado.

"todo el mundo intenta ocultarse de las sombras y la oscuridad pero es cuestión de tiempo que te encuentren, no puedes huir sin esconderte, no hay ningún lugar donde ir, es mi deseo aceptarlo, estar sólo en medio de la multitud. Sé que todo es una ilusión y debe terminar, nada bueno dura mucho"


Además, como postre, en una historia paralela a ésta guiada por el maestro Herzog, unas monjas de una misión en Sudamérica, ponen su fe y pureza a prueba saltando sin paracaidas desde un avión, otra simbología del sacrificio que cuesta ser diferente o haber elegido vivir tu vida por los ojos de otro (en este caso Dios) Momentos de delirante placer estético, y un final que no deja indiferente a nadie, para una película en la que como ya apuntaba "Being John Malkovich" de S.Jonze, la realidad de actores o personajes famosos se entremezcla con la ficción.


Marian Garrido Herrojo



domingo, 23 de noviembre de 2008

Eyes wide shut y El relato soñado

Por Raquel Espinar Plitt


La novela de la que parte la última película de Kubrick "Eyes wide shut" sufre pequeñas alteraciones propias de la transformación de la página a la pantalla, tanto por mantener la dinámica cinematográfica y su necesario esquema específico de la evolución del argumento como para añadir la visión del director y "hacerla suya". La película profundiza en ciertos aspectos que Schnitzler presenta como asimilados y generalizados (la sexualidad y la tendencia hacia la infidelidad de Albertine... ) pero mantiene el interés y simbolismo de algunos contextos que son esenciales para entender el sentido final de la novela. El deseo, la pasión.. son temas ampliamente tratados por todas las disciplinas, pero el carácter peculiar de esta historia es la visión innata de aquello que se convierte no en un tabú social digerido, sino en una necesidad tan básica y pura en la naturaleza ... "animal" que no sólo se niega al entorno colectivo sino también a nosotros mismos y a nuestra propia consciencia. No habla sobre aquello que no queremos mostrar, habla de aquello que no incluimos en la configuración de nuestra naturaleza durante el aprendizaje del concepto de lo que es uno mismo y sus instintos, el "yo".
Esto que se halla oculto a nuestra consciencia está tratado por la filosofía y la psicología, destacando S. Freud seguido de C. G. Jung. El carácter oculto de inconsciente cobra vital importancia en el análisis de nuestras frustraciones, en la concepción de nuestra identidad social y en lo que representan los sueños. La conciencia civilizada (inconsciente colectivo, Jung, arquetipos...) se ha ido alejando progresivamente de sus instintos más básicos, replegándolos al inconsciente. El sueño funciona como el equilibrador de lo consciente y lo inconsciente ante el yugo de la "razón" (en la que también influyen inevitablemente estos sucesos de la psique) durante la vigilia. Sin embargo Schnitzler introduce de alguna manera aquello que de forma consciente no solemos asimilar en un ambiente en el que esta razón e intelecto son superados por la liberación de todo lo que se reprime en el "cubo de basura" que es el inconsciente (Freud), en el que repudiamos lo rechazado por el consciente como protección del "yo", mediador entre el ello (el que exige la satisfacción de estas represiones) y el entorno exterior: deseos ocultos, pasiones animales, recuerdos traumáticos, conductas enfermizas, causas de neurosis, instintos tan salvajes que son irreconocibles en una sociedad ....
Este ambiente liberador aparece representado principalmente por la máscara de carnaval, en la que se ven envueltos los personajes de la novela y que los define de forma esencial. Establece un escenario plenamente simbólico para el desarrollo de lo que en él ocurre. Si el sueño permite el camino libre al inconsciente, la máscara actúa como un sueño (de ahí el carácter onírico, personajes fantasiosos, no "reales", lo oculto... ) al descargar en el consciente todo esto, justificado por la seguridad de una máscara que evade de la realidad en la que en el fondo, y sin importancia, se está actuando.
Esta máscara, el "ocultarse" a sí mismo implica para Schinitzler mucho más que una oportunidad de ser "natural". Parece que al quitarse la apariencia, las normas morales y éticas, las conductas aprendidas en medio de una naturaleza básicamente colectiva, uno se despoja la capa de la sociedad y deja traslucir todo aquello que mantenemos reprimido al tener la cara destapada (que no es espejo del alma, sino que es la presentación de uno mismo hacia el entorno y por tanto principal represor de todo lo opuesto a él que se haya en nuestro interior más elemental). Aquello por lo que, por así decirlo, nos avergonzamos y contenemos involuntariamente, que es la única forma de adaptarse a una sociedad. Es lo OCULTO.
Estas pulsiones y necesidades frustradas encontrarían salida en esta situación de "carnaval" (¿como sublimación?) cobrando importancia la pulsión sexual (el eros y el thanatos (pulsión de destrucción), la energía del eros sería la líbido.... ) sobretodo propiciada por la desaparición del "yo" que ven los demás. Liberamos el inconsciente y este está repleto de elementos e instintos plenamente innatos que nos sobrecogerían a nosotros mismos... incluidas las pulsiones sexuales de Freud. Estas represiones tienen el efecto de producir el odio y la cólera (también neurosis, mantenidos en la línea límite del control mediante las sublimaciones )... ¿Qué se producirá al liberarla de forma directa y violenta (y no mediante religión, arte, etc)? Producirá lo contrario del odio intenso... una pasión enardecida... incontrolable... y tan natural del hombre primitivo y extraña a nosotros que parecería producto de los sueños, cuyas pulsiones necesarias implícitas no alcanzamos a comprender, precisamente por ese carácter simbólico que adquieren como protección ante la aduana del consciente represor.
A lo largo de la literatura y de la historia popular cantidad de personajes se han ocultado tras una máscara de carnaval, y me estoy refiriendo a personajes oscuros, extraños.... sensuales... no necesariamente con algo que ocultar, sino como una vía para dejar salir aquella naturaleza nuestra inviable en la sociedad. Quizá sea por eso qué es tan sensual el juego de las máscaras: en una primera lectura aparece el carácter morboso de enfrentarse de forma íntima ante algo que desconoces y que por lo tanto no acabas de comprender, pero también se exhibe esa sensación llena de pasiones de estar tratando con el hombre liberado, instintivo y salvaje...
Volviendo a los personajes de la literatura: por ejemplo el fantasma de la ópera, su secreto no consistía sólo en una cara desfigurada; el Conde de Montecristo, mitología (en relación de Eros y Psique, Eros como la libido oculta al consciente ), muchísimas otras obras conocidas de literatura y cantidad de películas de época,... un personaje agradable y políticamente correcto no es interesante detrás de una máscara, aunque después de pensarlo no soy capaz de definir al que sí necesita una máscara, eso si, tiene ciertos matices muy claros : es un Mr. Hyde del hombre social actual.
El carnaval entonces actúa a los efectos de un sueño, en el que sale a la luz el inconsciente. Los deseos, los símbolos... un sueño despierto, un dominio del inconsciente donde se encuentra todo lo elemental del hombre más animal y primitivo, y a la vez más necesitado de relaciones con otras naturalezas tan básicas como la suya... incluyendo aquello que no queremos aceptar de nosotros mismos y aquello que ni siquiera nos atrevemos a imaginar, que repudiamos al inconsciente a la espera de liberarse en los sueños .... o detrás de una máscara.
Por cierto, al parecer la palabra carnaval proviene de "carnevelarium" que significa "quitar la carne". Realmente proviene de la prohibición cristiana de la carne durante la cuaresma... ¿Pero no evoca cosas más elementales y puras de la naturaleza, despojarse de la carne, sacar a la luz aquello que tenemos debajo de ella, puramente visceral....?

Eyes Wide Shut

Por Clotilde Jesús Bandera Gallego

La conjunción de “El relato soñado” de Schnitzler y la película “Eyes Wide Shut” de Kubrick, intensifican la percepción en esta última al tener la posibilidad de unir imagen y narrativa, extrayéndose de cada una de ellas por separado un matiz diferente.
Una de las primeras escenas es el encuentro “emotivo” de los protagonistas frente al espejo, obviando las tópicas consideraciones del juego amoroso ante el espejo, podríamos plantearnos si Kubrick quiso utilizarlo como simbolismo, ello multiplicaría aún más los significados. Nicole Kidman mira al espejo haciéndole cómplice ( imagen más conocida y publicitada), mirada en la que prosaicamente podría leerse la infidelidad , pero a poco que profundicemos en los entresijos y en el contexto, podrían revelar distintos significados: el espejo invade otro espacio que va más allá de los límites que se escenifica, ampliandolo hasta detrás del propio espectador, el cual si repara en él tambien soñará con traspasar sus límites y sumergirse en ese otro mundo paralelo.
Desde el principio se establece el “punctum” de la obra. Una conversación inocente desemboca en el resplandor que provocan “las ocasiones perdidas”, en esta parte Schnitzler consigue una descripción poética y magistral hallando los términos precisos para expresar una de las múltiples singularidades de la psicología humana, utilizando expresiones sugestivas para referir los espacios recónditos y fascinantes de nuestra psique.
Kubrick sustituye esta descripción y, como medio de llegar a un estado de la ensoñación, recurre a sustancias que actúan como elemento desencadenante de la liberalización de la mente de Alice (Albertinne), manifestándose en movimientos nerviosos e inconexos de su cuerpo largo y delgado, mientras cuenta su aventura, que al exteriorizarse , abandona la belleza de los momentos en la que la experimentó , dejando el rincón de la psique dónde se albergó, para convertirse en el arma que arroja al que considera fue culpable de un sueño frustrado . Los sueños son fragmentos de la existencia que permanece oculta, donde los deseos, detrás de esas máscaras encargadas de establecer las distancias, se agitan suavemente. Pero un giro aturdido sería suficiente para que el conocimiento se abandonara a la ebriedad y todo se volviera imprevisible, porque un sueño no es solo el que comienza detrás del estado de la inconsciencia, sino el que puede surgir en cualquier lugar y circunstancia , a veces… envuelto en la misma realidad. Llegar a ese punto medio de la percepción al que Bacherlan lo identificaba con la evocación de la ensoñación , ese punto donde según, André Bretón “lo real e imaginario , lo comunicable y lo incomunicable, lo alto y lo bajo dejan de ser percibidos contradictoriamente” .Esa zona intermedia donde confluye la naturaleza y lo humano, tan inaccesible, tal vez porque se intente llegar a través del razonamiento, método inadecuado cuando se trata de descubrir verdaderos enigmas. Uno de los méritos de la película es precisamente caminar por ese punto intermedio poniendo de relieve su existencia.
La singularidad del relato y de la película es la objetividad con la que es tratado su objeto, consiguiendo que cada espectador llegue a diferentes conclusiones que irán desde las más simples a las algo más fundamentadas. Unos verán en el tema una crítica encubierta a la hipocresía de la “alta burguesía”, otros, el matrimonios de aburridas rutinas que desencadena la infidielidad; luchas entre las dos esferas existenciales: la prohibición y la trasgresión, paralelismo entre Eros y Thanatos. La complejidad del tema tratado da lugar a que ni el lenguaje visual ni el escrito consiga descifrar con nitidez los secretos, planteándose nuevas connotaciones que dan lugar a diferentes hipótesis. Sólo la intuición y la experiencia de cada espectador o lector será las que mejor podrán revelárselo a ellos mismo, para saber que hay que dejarlos que continúen albergados en los lugares escondidos de la mente .

viernes, 7 de noviembre de 2008

Magick Lantern Cycle



Por Marian Garrido Herrojo

Las siguientes producciones de Kenneth Anger, a pesar de formar parte de un mismo ciclo sobre la magia, y tener el mismo argumento que las anteriores, son sin duda las obras más literales, donde el tema se trata casi como una propuesta de cinema verité; No existen metáforas, la acción se desarrolla de una manera arrolladora y real.

Invocation of My Demon Brother, 1969:


Encuadramos la acción en interior de una habitación intercalada con soldados de Vietnam bajándose del helicóptero, como viene siendo habitual en sus últimos títulos de compaginar una narración teatral en interiores con juegos de mayor dinamismo a cargo de imágenes de archivo. Un personaje albino un tanto inquietante nos da la bienvenida; Seguimos con la presentación de los asistentes a esta peculiar reunión, que parece ser más un registro personal de personalidades cercanas al ocultismo que una película pensada para distribuirse y mostrarse. Hemos de tener en cuenta, que a pesar de la revolución que la década de los 60 puedo suponer, las artes ocultas y demoníacas no eran una práctica abierta, a pesar de la rápida asimilación por parte de muchos de los representantes de la vida pública.
Está claro el tirón que puede suponer un nombre famoso en los créditos de un film underground, pero la exposición y vinculación con una sección tan extrema de estos personajes, me hace pensar que realmente no se trata de un juego o moda, y que el propósito es firme y meditado.
Lo primero que apreciamos al empezar es una banda sonora a cargo de Mick Jagger, pre cambio de sangre, atronando y creando un ambiente cargado y axfisiante con un sintetizador Moog, los propios Rolling Stones aparecen en el corto, junto con imágenes de público de un concierto, que bien podría ser Woodstock.


No acaba aquí el elenco de cellebrities: Jimmy Page (Led Zepellin), Bobby Beausoleil, Marianne Faithfull, como veremos más adelante, se suman y apadrinan el proyecto.
La alusión directa del consumo de drogas, sin ninguna figura poética esta vez que lo enmascare, la invocación casi a tiempo real protagonizada por el propio Anger, la ceremonia guiada y presidida pon Anton LaVey en su propia casa habilitada para estos menesteres, y la superposición de la figura fetiche de los "Ángeles del infierno" además de los ya clásicos signos mágicos y recurrentes que podemos encontrar en la etapa llamada Magick Lantern Cycle donde pretende rendir homenaje a la figura y obra de Crowley, por quien está obsesionado, y hacernos ver que la magia negra vive en la actualidad de muchas maneras y formas.
El críptico mensaje que un misterioso personaje acerca a cámara "Zap, estás embarazado/a, eso es brujería" creo que debe interpretarse como un desvarío personal de las personas implicadas en el ritual, que además de quedar filmado en 16mm seguramente tenga una efectividad real, y al presenciarlo pretenden que te impregnes o te hagas en cierta manera cómplice de la experiencia. Un imprescindible como documento gráfico de una época.


Lucifer Rising, 1972:


Cerrando una etapa en Anger, este film, sorprendentemente, esta rodado en su mayoría en exteriores de lujo, inimaginables actualmente, menos en producciones de coste mas bien reducido. Las pirámides, la esfinge, Stonehenge...
Podría ser cierto que la influencia de las personalidades metidas en el ajo de seguidores del Thelema, pudieran mover permisos.
El argumento, esta vez, concierne sobre los poderes luciferinos, que se refieren a la luz, y la resurección, por lo que a diferencia de la destrucción y caos a los que Anger nos tenía acostumbrados, vemos aquí un mensaje más positivo.
Osiris, dios de la fertilidad y juez de los muertos, junto con Ast, evocan el nacimiento de la luz, Lilith (Marianne Faithfull) les ayudará desde la otra punta del mundo para la causa. Apareciendo en las escenas interiores, el retrato de Crowley, la estrella del Thelema, el libro de la ley, quedan claras las intenciones evangelizadoras de la película. Cuenta la leyenda que el Liber AL vel Legis fue narrado en su totalidad por una fuerza llamada Aiwass estando en el Cairo. En la obra literaria se narra la sucesión del Eón de Osiris, al igual que en Lucifer Rising, donde el señor de la luz invade todas las cosas.

Que decir tiene, reseño la aportación sonora de Beausoleil como pieza progresiva de acompañamiento, pues a pesar de que muchas imágenes donde le podemos ver a él y a Page, que iba a ser el compositor inicial de la banda sonora, están rodadas años atrás, en 1972 Beausoleil se encontraba en la cárcel por ser ejecutor de los asesinatos de la Familia Manson. Tenemos pues entre manos otra joya del retrato de la era psicodélica y de la involuntaria culminación del Camp imponiéndose en el destino del ocultismo.
Marian Garrido Herrojo

martes, 4 de noviembre de 2008

“Sangre de Mayo” de José Luis Garci conexión con la obra de Galdós…

Por Juan Aparicio Gutiérrez.

“Del 19 de Marzo al 2 de Mayo” es el intervalo temporal espacio-narrativo del año 1808 que comprende el relato de Benito Pérez Galdós que he utilizado para complementar un poco más la información de la película de Garci.
Empezando por los personajes, se encuentran: Gabriel Araceli(en la película interpretado por Quim Gutiérrez) es el protagonista de la historia, un joven de 16-17 años, que trabaja en una modesta imprenta madrileña “Diario de Madrid”. Con este personaje,hago una mención especial a las características del estilo literario de la obra, ya que deposita tal función en el narrador, papel que juega este mismo personaje protagonista.
• Procura mostrar en las obras una reproducción fiel y exacta de la realidad “costumbrismo”(género del siglo XIX, novela narrativa.)
• Hace un uso minucioso de la descripción, para mostrar perfiles exactos de los temas, personajes, situaciones e incluso lugares; lo cotidiano y no lo exótico es el tema central, exponiendo problemas políticos, humanos y sociales.
• Rechaza el sentimentalismo, muestra al hombre objetivamente pues da toques de una realidad cruda.
• El lenguaje utilizado en las obras es coloquial y crítico, ya que expresa el habla común y corriente.
• Así como rechaza lo sentimental, de igual forma lo espiritual, dando como resultados toques individualistas.
• Las obras muestran una relación mediata entre las personas y su entorno económico y social, del cual son exponente; la historia muestra a los personajes como testimonio de una época, una clase social, un oficio, etc.
• Temas relacionados con los problemas de la existencia humana.
• El autor analiza, reproduce y denuncia los males que aquejan a su sociedad.
• Transmitir ideas de la forma más verídica y objetiva posible.

El resto de personajes son:
Inés(la amada de Gabriel); una hermosa y sencilla joven de 16 años, huérfana (interpretada por Paula Echevarría) Galdós la representa como una joven bella culta,inteligente, astuta y al mismo tiempo prudente, que vive junto con su tío el humilde sacerdote “Reverendo” Don Celestino Santos del Malvar(interpretado por Manuel Galiana) en el “Real sitio” de Aranjuez.
El perfil que se le da en el relato a Don Celestino, es de un personaje, bueno, devoto, hombre de fe. En un primer momento, es de los que opina que las tropas francesas no quieren invadir España sino proteger su territorio. Es pariente lejano de Godoy (interpretado por Manuel Tejada) retratado, como noble, generoso según la opinión del
intachable.
El señor Santurrias es otro Sacerdote, con el que Don Celestino va a mostrar su confrontación de caracteres, ya que desde su aparición muestra su desagrado por las tropas francesas, procesando su agrado por el reinado del “Príncipe de la Paz”, Fernando VII, el desado por todos.
En relación al personaje anterior, se encuentra Lopito, que estará junto con Santurrias y Gabriel en el motín de Aranjuez, en el Palacio Real, Godoy sale perjudicado.
El conflicto se desarrolla cuando Don Celestino planea entregar la tutela de la huérfana Inés, trasladándola a Madrid con sus tíos, con el fin de que la joven goce de una vida con mejor posición y bienes que la que puede proporcionarla. A Gabriel no le es de su agrado esta decisión aunque termina por aceptarlo.
Los tíos de Inés son: Don Mauro Requejo(Miguel Rellán) y Doña Restituta(Tina Sáinz). Los presenta como dos personas normales que tienen un comercio de telas cercano a la casa de postas y espartinas, en la calle de la Sal número 5. En cada uno de ellos Galdós presenta la tacañería hasta el extremo(en Restituta, alta y flaca)y la figura del despilfarro en Don Mauro, además de representarle como un inútil, textualmente “izquierdo”(alude a la derecha como el lado bueno, virtuoso del ser humano, y a la izquierda el lado, torpe y dependiente, más atrofiado que encaja con el perfil del personaje. Intenta casarse a toda costa con su sobrina, simplemente por su voluntad, con la excusa de hacerla subir de posición, proporcionarle riquezas, bienes que jamás podía esta imaginar…etc.)Estos dos personajes mantienen en contra de su voluntad a Inés como sirvienta en su casa, tan grave llega la situación a ser que Gabriel, en su afán desesperado por sacarla de aquella casa, se ofrece como criado de los Requejo para así tramar un plan para liberar a Inés de su prisión.
En ello, le ayudará Juan de Dios, un joven mancebo sirviente de casa de los Requejo, enamorado de Inés nunca logrará conquistarla, pero si colaborará en el plan que le propone Gabriel, para liberarla. Pero la felicidad no les durará mucho a Gabriel e Inés una vez llevado a cabo su plan, porque cuando consiguen liberarse de los Requejo, sucederá que empiece la sublevación del 2 de Mayo por todo Madrid, entra la escena de “La carga de los mamelucos” inmortalizada por Goya.
Galdós hace referencia entonces, a la aparición de tropas por la calle Mayor, la Montera, Carretas, Carrera de San Jerónimo, entre otras muchas muy importantes que son cruciales en la buena ambientación literaria de la obra, junto al grito “¡Viva Fernando, viva España, muera Napoleón!”. “Los que no vociferaban en las calles, vociferaban en los balcones, y si un momento antes la mitad de los madrileños eran simplemente curiosos, después de la aparición de la artillería todos fueron actores”.
En cuanto a movimientos político-militares, anteriores a la sublevación del 2 de Mayo, quitando el motín de Aranjuez, menciona Galdós el nombramiento del general Murat para llevar a cabo en medio de la confusión la invasión de las tropas francesas a cargo de Napoleón. Cabe destacar que esta parte, en la película se queda bastante abandonada; Garci no deja constancia para nada, en la mayor parte de su visión sobre el relato, de los mayores movimientos políticos(el exilio de la familia Real a Bayona, por ejemplo solo lo nombra muy de pasada, entre los personajes, en el relato de Galdós se suceden muchas más conversaciones relevantes en torno a estos temas, que en la película, trata todo mucho más “barnizado” y “sintetizado”, ese costumbrismo la verdad, solo se denota en la fotografía y aspectos visuales como pueden ser la caracterización…etc)

El final: conexión con la obra de Francisco de Goya.
“…después como ondulaciones concéntricas en mi cerebro parecidas, a las que forma una piedra cayendo al mar; después un chisporroteo colosal que difundía por espacios mayores que cielo y tierra juntos la imagen de Inés en doscientos mil millones de luces; después oscuridad profunda, misteriosamente asociada a un agudísimo dolor en las sienes; después un vago reposo, una extinción rápida, un olvido creciente e invasor, y por último nada, absolutamente nada.”
El desenlace se produce en los fusilamientos en la madrugada del 2 al 3 de Mayo de 1808, cuando nuestros protagonistas: Gabriel, Don Celestino e Inés van a ser fusilados por las tropas francesas. Hay importantes variaciones en esta parte entre la visión de Garci y el relato. En el final del relato, Don Juan de Dios, el joven mancebo, logra que los franceses le entreguen a Inés, salvándola de su terrible destino.
Gabriel y Don Celestino, no corren sin embargo esta suerte, y caen ante los franceses fusilados.
Garci es más sintético y digamos, literalmente “los fusila a todos”, Don Celestino, Gabriel e Inés.
En su favor, tengo que decir, que me parece bastante acertada la reconstrucción visual que hace de esa escena con la obra de Goya, “Los fusilamientos del 2 de Mayo”(la postura de los personajes, algo previsible, pero en mi opinión al fin y al cabo bastante efectivo en ese momento, quizá bajo mi juicio uno de los momentos más atractivos, visualmente de la película.)
Para terminar, creo personalmente que aunque la película se base en un tema muy interesante como este, y aun más lo digo después de haber leído la obra de Galdós, bajo mi punto de vista la película es “aburrida” mientras que la obra literaria conserva muy bien la esencia del tema tanto social como político, algo que no logra la película. Algunos personajes se quedan excesivamente planos en comparación con la obra literaria, el caso de la “protagonista” Inés, el papel que desempeña en la película me parece horriblemente “recortado” y “menospreciado” ya que se le da una importancia, bastante nula en comparación con el texto.
Me dio la impresión de ver una película partida en dos: la historia de Inés y Gabriel, tratada a modo de “culebrón” dando más importancia de la debida al personaje de la condensa Anastasia, para hacerlo más “interesante” …Y por otro lado, la película “institucional” que te relata lo que tu “quieres ver” supuestamente, porque esta función solo la desempeña en los 45 últimos minutos.

Scorpio Rising, 1965 :




Por Marian Garrido Herrojo

Con la misma estructura ritual que en "Inauguration of.. " trasmutada al desconcertante mundo de los motoristas, éste filme pasa por ser su obra de inflexión hacia el pulp más sobrado de intenciones.
Anger, sigue en sus treces ocultistas, incluso cuando el cuadro es bien distinto.
La reminiscencia final a la destrucción de Cristo, representa la preocupación del director sobre el final de la era Cristiana de Piscis, y la entrada de la era de Acuario.
La imaginería de los motoristas, nos acerca al ritual que un mago puede preparar para su viaje místico, pero extrapolado a la contemporaneidad y a la violencia; El preparativo con objetos fetiche, y después la destrucción.


La adoración a los objetos (las motos, y el mimo con las que las limpian), el cuero, los anillos y cadenas, la iconografía pop en los cómics y pósters de James Dean, la televisión (Están emitiendo "Salvaje") y las drogas. Sin duda el referente está claro en su posterior obra "kustom kar komandos",1965 de idéntica temática y trato homoerótico, donde salen a relucir muchos de los detonantes para el posterior cine gay (Vemos reflejados a un primerizo Almodovar, y a unos Richard Kern y Nick Zedd con más cara que espalda)


La imaginería de los moteros; Calaveras, cruces, simbología Nazi, nos introduce en un concilio similar a una logia iniciática del caos y el desmadre, donde no faltan maestro de ceremonias y otro final apocalíptico.
En la estructura narrativa entran en juego el múltiple y complejo montaje de las imágenes, por primera vez aparece la blasfemia cristiana, y la provocación doble social; La simbología Nazi hará levantar heridas a un sector de la población, tal como la representación de "los tipos duros" asociados a la erótica homosexual.
Quizás forme parte de un todo que nos viene a dar un mensaje sublinal bastante pasado de rosca y que no deja cómodo a nadie. Religión, poder y sexo. Una demostración de que Anger hace lo que le viene en gana, y opina y transgrede, caiga quien caiga, firmando una obra de final malogrado para "nuestros humildes narradores" después de una alocada noche de perrerías, pero que no deja un sabor de boca a moralina, más bien a escándalo y herejía si tenemos en cuenta la época en la que estamos.
La utilización de la música en este film, es si duda una aportación muy novedosa que podemos catalogar como pionera y apropiada hasta nuestros días; El pop, para reforzar una idea más que notable en este corto, sobre el respeto que le merecen los pilares protagonistas, de claras intenciones "afeminadoras".
También muy destacable, los créditos iniciales de la obra, si no resultan una genialidad de la plasticidad y la síntesis en todos los sentidos, al menos de los más originales que pudiéramos citar hasta la fecha.


Marian Garrido Herrojo

domingo, 2 de noviembre de 2008

Yo, Robot y la Torre del Agua de la EXPO de Zaragoza

Francamente, no sé cómo enfocar el asunto... ¿Fluir de ideas? ¿Influencias? ¿Inspiración? Uno de los edificios más característicos y emblemáticos de la pasada EXPO de Zaragoza, la Torre del Agua, obra de Enrique de Teresa (imágenes inferiores), guarda un gran “parecido” con una de las “edificaciones” que podemos ver en Yo, Robot (2004) de Alex Proyas (imágenes superiores); concretamente, se trata de la sede de la empresa fabricante de robots, la United States Robotics (USR). Y lo más curioso es que el paralelismo no se limita al aspecto exterior, sino que, incluso, también se aprecia en el interior, de concepción sumamente peculiar, puesto que tanto en la película como en la obra de Zaragoza existe un espacio diáfano destinado a contener una escultura monumental: la de un robot, en la película y la de la “forma acuosa” de Pere Gifre, en la Torre del Agua.
Las diferencias entre ambas “edificaciones”, que son más sensibles en el interior, derivan de las peculiares servidumbres de ambas. La de la película contiene las oficinas de la USR, mientras que la Torre del Agua es una edificación prácticamente hueca, concebida a para que los visitantes peregrinen por las dos rampas helicoidales que recorren las fachadas y en la que apenas existen unos pocos metros cuadrados de espacio convencional utilizable para áreas de servicio, aseos y salas de exposiciones.

sábado, 1 de noviembre de 2008

kenneth Anger, su satánica majestad:

Por Marian Garrido Herrojo




A través de 4 de sus films más destacados intentaré acercarme a la figura de este director de culto.
Discípulo de Aleister Crowley, practicante de magia y artes ocultas relacionadas con fuerzas demoníacas, agitador cultural relacionado con la starlet psicodélica, azotador de Hollywood con su lengua viperina (Ha editado dos "Hollywood Babylon" donde no deja títere con cabeza y amenaza con el tercero) éste anciano de 81 años rodó su primer corto a los 14, y aún en activo se ha consolidado como una de las principales figuras controvertidas de este siglo, pionero del cine homosexual y underground, gran influencia para cineastas como Waters o Scorsese (yo apuntaría a Almodovar también) sentó las bases para el Cinema Verité, fascinando al propio Cocteau, pero pocos reconocieron su legado. Sus películas intentan ser invocaciones, basadas en el control mental y alteración del espectador.
Sus señas de identidad se desglosan en la innovacion narrativa, la poética visual cercana al cine mudo como puede ser la recuperación de elementos en el montaje perdidos con la llegada del sonido, la inclusión de bandas sonoras de corte pop por primera vez, acercándolo al pionerísimo genero del videoclip ya en los años 50.
Según Tony Rayns:
"Anger tiene una intuición natural para los elementos necesarios en el cine: Sus obras funcionan con las teorías de Eisenstein, y ha llegado más cerca de ellas que cualquier producción de cine comercial, estando al nivel del mismo Eisenstein."



La mitología simbólica mostrada a lo largo de sus obras (dioses, fuerzas, demonios...) o sus visiones de ellos en la cultura pop. Poderosas imágenes esotéricas y complejas estrategias de montaje como superposiciones y la inclusión de sublinales quiere introducirse en el subconsciente.
La extructura de sus obras suele ser un cresccendo dentro del ritual, tanto real como símbólico, que acaba con la fuerza invocada y sus acólitos desmadrados.

Inauguration of the pleasure dome,1954:
Nos introduce en la casa del mago Lord Shiva, donde nos va presentando su transformación y preparación para la ocasión: joyas, maquillaje, parafernalia y alusiones a la ingestión de drogas, como el gesto de tragarse la cadena de oro (El mismo Anger dice haberse inspirado en una fiesta de Halloween a la que asistió, suponemos con una compañía de lo más reseñable)
Los invitados empiezan a llegar, vestidos como deidades mitológicas y asumiendo su papel, todos traen una ofrenda narcótica. Aparecen también personajes sacados de "El gabinete del Dr. Caligari"
La acción transcurre teatralmente, invadida por el colorismo psicotrópico y la transmutación de cada personaje; La mujer escarlata, gran concubina celeste, Astarté, el fauno y las uvas de Baco, Hécate y sus hongos, para que la fiesta pueda comenzar, una especie de "Dolce Vita" que acaba en un rápido montaje consumiéndose en las llamas apocalípticas del frenesí.
La banda sonora es integramente del Checo Leoš Janáček.


Marian Garrido Herrojo

De Sica, El ladrón de bicicletas, 1949

La vertiente católica del neorrealismo: el amor paterno-filial (la familia) como fundamento del orden social.

viernes, 31 de octubre de 2008

QUEMAR PARA OLVIDAR...

Por Javier Ramírez Serrano

Quemar después de leer es una película predecible, de crítica fácil y excesivamente transparente. Una obra de transición donde los hermanos Coen demuestran, una vez más, que conocen perfectamente la fórmula del entretenimiento y cuáles son las posibilidades para divertirse y que les paguen por ello.
Es un film transparente, no sólo porque se encarnen metafóricamente en dos de los personajes, sino porque prácticamente deja entrever todo el mecanismo de creación del mismo. Me extrañó no ver ninguna cámara, foco, micrófono o incluso a ellos mismos riendo a modo de cameo. Y es que en ningún momento puede dejar uno de imaginar a los directores tomándose unas cañas, a medio rodaje de No es país para viejos, mientras idean un argumento que se mueve en exceso en la risa fácil, el estereotipo subrayado, y los golpes “inesperados”.
Y es precisamente por ese conocimiento del medio como logran entretener, a pesar de todos los “defectos” previamente expuestos. El ritmo del film es bueno y el guión está bien escrito (a excepción de un estrepitoso final), que no el argumento. Hasta tal punto es cierto todo esto, que, incluso siendo tan floja, permite una reflexión posterior, casi más interesante que el propio visionado de la película.

Dentro de los elementos que me llevan a calificarla de poco interés debo recalcar el desequilibrio que existe entre los distintos actores y papeles. Si bien toda la obra se mueve en una sobreactuación buscada acorde con unos estereotipos exagerados, hay ciertos intérpretes que consiguen no desconectar al espectador siendo lo suficientemente “finos” como para no pasarse con su personaje. Es éste el caso de Malkovich o McDormand, los más carismáticos y mejor conseguidos, mientras que Pitt y Clonney responderían al ejemplo de sobreactuación bromeada por los propios actores, y completamente fuera de control. Es curioso además que un actor como Brad Pitt que ya ha realizado papeles un tanto extremos como éste de forma más que correcta (Snatch, cerdos y diamantes) aquí se mueva de forma patosa y sin ninguna credibilidad. Incluso así consiguió que esbozara alguna sonrisa cuando hace de tipo duro.
Y es que por mucho que el papel sea exagerado y estereotipado no deja de ser completamente imprescindible el ser creíble y lógico de cara al espectador y a la propia película. Clonney es resumible con una gran sonrisa de oreja a oreja de forma continua.
Los personajes en sí pueden llegar a tener su gracia dentro de la ridiculez que los enmarca. Una mujer obsesionada con el físico, un chico guaperas de gimnasio, un espía alcohólico y con mal genio, una doctora fría y dominante harta de su vida matrimonial, un exagente mujeriego, un jefe enamorado de una de sus trabajadoras… todos unidos por engaños amorosos típicos y por el factor conductor de la película, la mediocridad.
Una mediocridad que ralla lo absurdo en excesivas ocasiones. Imagina que durante dos horas pisas cinco mierdas, tropiezas cuatro veces, te equivocas de autobús, y caes sobre una señora con la mala fortuna de tocarle un pecho. Llegas a casa y pillas a tu mujer con otro, y por último, mientras das un paseo, ves un tiroteo en la acera de enfrente. No es muy distinto lo que ofrece Quemar después de leer.
Una composición en torno al azar y la normalidad que podría ser muy interesante si no fuera porque la acumulación de situaciones y variantes absurdas es tal que hasta satura en su estupidez.
Son contadas las veces que el film sorprende, y cuando lo hace es de una manera tan sumamente “fácil” que hasta puede resultar “increíble” (la muerte de Brad Pitt). Quizá el momento más inesperado de todo el metraje es el final, pues no es más que el fin del libreto de anotaciones de los directores. Se acabaron las ideas se acabó la película,
Por último que decir de la “crítica” hacia los servicios de inteligencia americanos cuando la película no se preocupa más que de cuernos, “fuck yous” y tropiezos.
Aún con todo esto no se puede negar que los Coen son capaces de crear una obra ejemplar dentro del más puro cine de entretenimiento. Si nos vamos al género concreto del humor no se puede decir lo mismo.
Una película de poco interés dentro de su filmografía y recomendada si no hay nada más en toda la cartelera.

jueves, 30 de octubre de 2008

Fellini, Las noches de Cabiria (1957)

¿Se inspiró Coppola en Fellini?

Paralelos entre La Strada y El padrino II

Los orígenes del neo-realismo italiano...

Yosujiro Ozo, Hijo Único, 1936

miércoles, 29 de octubre de 2008

¿La Dolce Vita?

Por Clotilde J. Bandera Gallego

En un ambiente de corrientes existencialista y deconstructivista Fellini realiza “ La dolce vita “, hay alusiones en sus conversaciones que muestran sombras de estas tendencias : “en mis películas no sugiero soluciones , no ofrezco métodos , no propongo ideologías : me limito a ser testigo de lo que me sucede , a interpretar y expresar la realidad que me rodea”.
Sin embargo Fellini parece estructurar “La dolce vita” en trece secciones algo que recuerda a la Divina Comedia (escrita en trece cantos). Marcello, hilo conductor de la historia, como Virgilio servirá de nexo en una serie de noches y mañanas cuyo orden no atiende a ningún método específico. Pero Marcelo también parece personificar la mirada de Fellini, consiguiendo así una original técnica expositiva mediante el doble personaje.
La película se inicia con la mirada al cielo de unas mujeres atraídas por el ruido de un helicóptero que porta la figura de Cristo( uno entre los varios elementos religiosos que usa Fellini con frecuencia como símbolos críticos). La estatua sobrevuela lo que será el escenario; Roma. El ruido de las hélices se superpone a las voces de los jóvenes, hasta que son sustituidas por las campanas del Vaticano, basta un acercamiento de la cámara a los edificios para intuir que la imagen va descendiendo a la ciudad.
En otra escena, vemos la casa de Enma, la novia de Marcelo que ha intentado suicidarse. Un largo pasillo de paredes desnudas y varios cubos de pintura en la entrada nos da esa sensación del compromiso que no se termina de concluir: Fellini gusta de recoger lo marginal, lo anecdótico, y así construye el otro relato oculto, el de los detalles y los símbolos.
El episodio mitológico de Anita Ekberg es uno de los más atrayentes. Comienza en esa fiesta donde el hombre con apariencia de fauno baila con Sylvia que evoca a la ninfa, la música llega a alcanzar el mismo nivel de sonoridad que las imágenes, estableciendo una especie de sinfonía. Todo ello unido a la manipulación de la luz, característica del cine expresionista, trae a la memoria cuadros de Rembrandt o los frescos dionisiacos de Pompeya.
Es destacable la escena en la que Sylvia encuentra un pequeño gato que acaricia y deposita en su cabeza mientras pasea por las calles, esta aptitud nos revela su debilidad a la vez que su virtud protectora. La iluminación se presenta como charcos de luz que contrastan con la oscuridad, y la acción se va envolviendo en una especie de atmósfera mágica que proviene de varios fundidos continuados percibidos como una insinuante nebulosa de ensoñación que se pierde en el tiempo.
El momento mas mítico se alcanza en la fuente de Trevi, los planos fundidos encadenados dan paso a una secuencia que se resuelve con planos fijos y algún que otro de seguimiento. Ella exclama al ver la fuente presidida por Neptuno “My God” y se adentra en las aguas proyectando la imagen de una nereida, llama a Marcelo que va a su encuentro, se suceden imágenes de gran sensualidad hasta que la fuente calla y un beso queda suspendido en el aire como ese ideal inalcanzable que solo se queda en el placer de soñarlo, el paso a la realidad es casi ridículo y cómico a la vez, un hombre en bicicleta con una caja en la cabeza los observa.
La muerte de Steiner y sus dos hijos es el capítulo de mayor crudeza. En escenas previas al suicidio, Enrico habla poéticamente acerca de la soledad y el miedo al futuro, que recuerda a la poesía existencialista de la Italia de los 60 que estuvo representada por Cesar Pavese, intencionalidad que Fellini refleja al darnos la clave con un rótulo en uno de los coches de los periodistas que intentan cubrir la noticia ,en donde se lee “Sera Paese”. Varias tomas escalofriante: el cuerpo rígido sin vida de Steiner sentado en el sillón, la llegada de su esposa a la que rodean los periodista desconociendo lo ocurrido, pero la más terrible es la que ejecuta la cámara al realizar un acercamiento a las camas vacías de los niños, y es que Fellini narra con la cámara, haciéndola funcionar como las reglas gramaticales funcionan en la escritura.
La pretendida orgía tiene matices decadentistas. Marcelo y los asistentes de alguna manera pretenden la evasión de la realidad cotidiana. Fellini llena el escenario de personajes, sin embargo los diálogos que parecen superficiales, consiguen dejar patente la soledad de los interlocutores. Se habla de amor pero es evidente que no existe, la seducción termina en un artificio y así deja al descubierto zonas recónditas de la sensibilidad y del inconsciente.
Al salir de la fiesta los invitados observan que algo está sucediendo en la playa y se acercan. Estas últimas escenas reúnen una serie de elementos de síntesis que recuerdan al cuadro del nacimiento de Venus de Botticceli, velos flotando, vestidos de gasas agitados por la brisa entre troncos de árboles y al final, en la orilla, el monstruo marino de forma ovalada que parece evocar la concha de donde nace la diosa. Puede que extrapolando las imágenes, la joven que desde la orilla hace señas a Marcelo simbolice a Venus. Aunque si diéramos otra vuelta de tuerca y volviéramos al paralelismo encontrado entre la Dolce vita y la obra de Dante podríamos llegar a la conclusión que al igual que La Divina Comedia, finaliza en el trigésimo canto con la visón de la divinidad de la Virgen, Fellini concluye también con la imagen de la adolescente-niña.
En definitiva, nos encontramos ante una película en la que la percepción y las sensaciones se van transmitiendo a través de imágenes metafóricas , símbolos y otros elementos como luces y sonido empleados retóricamente. Esto la hace susceptible de una gran riqueza de significados y al desentrañarlos se llega a la conclusión de que la vida es una amalgama de sentimientos y aptitudes que lejos de concretarse en una idea abre nuevas incógnitas y Fellini intenta contárnosla de una forma terrible y dulce a la vez.

domingo, 19 de octubre de 2008

Otra interesante película de los hermanos Coen: Quemar después de leer

Nueva radiografía acibarada de la sociedad contemporánea, que en este caso se centra no el universo de la marginalidad (como en Este país no es para viejos), sino en el de la gente integrada, comprendida en un variopinto repertorio de posibilidades sociales. Como es habitual en las películas de estos autores, destacan los personajes estúpidos, especialmente estúpidos, sobre los que construyen una historia surrealista “de espías” y “deseos primarios” más aceptable (menos forzada) que la de El gran Lebowski. Viéndola recordé la Viridiana de Buñuel, porque como ella, es de esas “comedias” que te hacen reír más al reflexionar que al verla en la pantalla; los hermanos Coen se distancian de Buñuel en invertir el juego de dependencias relativas entre hombres y mujeres: En Quemar después de leer son las mujeres quienes, al manifestar sus deseos, mueven la trama argumental...
Sintetizando: Es una magnífica película de entretenimiento que, además, ofrece los perfiles adecuados para una valoración de mayor rango, y sitúa a estos realizadores en el estadio de mayor calidad del cine nortemericano.

sábado, 27 de septiembre de 2008

El cine español entre la idea de “Nación Española” y “La memoria histórica”

El otro día, coincidiendo con la visita que realicé a Caixa-Forum para contemplar la exposición de Sir Charles Chaplin, me crucé con José Luis Garci, el director de cine que, por razones mágicas e incomprensibles, firmó una película que fue premiada con un Oscar de Hollywood. Él acaso se dirigiera hacia el Congreso de los Diputados, o al menos, esa dirección marcaban sus pasos; yo, a recoger mi automóvil, que me esperaba en el aparcamiento de la plaza de Neptuno. Nos miramos con perplejidad, como se miran quienes asumen relaciones asimétricas, y ambos seguimos en la dirección de nuestras respectivas intenciones: él debió comprender que yo le conocía, aunque él no supiera de mi existencia y, muchos menos, de los juicios que me merecen sus opiniones de cinéfilo y sus últimas películas... Es posible que, por entonces, aún no supiera que su obra no sería elegida para concursar a los premios de la Academia norteamericana...
Sólo han visto la película unos cuantos “privilegiados”; entre ellos quienes la han propuesto como candidata para representar al cine español y algunas otras pocas (o, tal vez, muchas) personas de su “cuerda” (sean los lectores indulgentes con mi tendencia irrefrenable a los chistes malos). Con lo visto en sus últimas películas y con lo leído a pluma de Agapito Maestre, se me ocurren varias reflexiones preliminares que ofrezco al lector...
La primera: parece tratarse de una película inclinada hacia la manipulación política del espectador, siguiendo los criterios de la vertiente más “casticista” del PP y las fórmulas empleadas en la industria norteamericana desde, al menos, la época de la caza de brujas y en Europa, desde Goering... Y nadie piense que estoy llamando ultraconservador a José Luis Garci... aunque lo sea, porque esos recursos se han utilizado igualmente en las corrientes ideológicas opuestas, en las de las otras “Cuerdas”. Entiendo que esta circunstancia se puede dejar a un lado si la película está bien resuelta en sus componentes morfológicos fundamentales (caso de Riefenstahl, de Costa-Gavras, de Briam de palma, etc.). Por desgracia, conociendo el equipo que el señor Garci ha utilizado, afín al de sus últimos engendros, caben pocas esperanzas positivas. En el caso de José Luis Cuerda, las expectativas son mejores...
La segunda: conociendo el cabreo que, muy probablemente, producirá la película en los ambientes históricos no conservadores (progresistas, nacionalistas, etc.), ¿a quién se le ocurrió proponer películas tan “polémicas” para representar a “España”? ¿A quién se le ha ocurrido esta confrontación de “cuerdas”?
Y por fin: ¿el cine español debe reflejar el debate entre los partidos políticos mayoritarios? ¿Se debe hacer eco de una polémica que a casi todos nos deja fríos?
Francamente, el ambiente apesta al hedor de las subvenciones...
Cuando haya visto ambas películas... o cuando haya visto, al menos, una de ellas, completaré este comentario... aunque acaso sea mejor no verlas, porque oteo en el horizonte la sombra de una irritación muy profunda... Cuando alguien me pregunta cóm odistinguir una película buena de otra mala, suelo responder que no siempre es fácil, pero si es sencillo saber si nos encontramos ante una película mala: cuando la historia se construye sobre cimientos maniqueos. Es muy difícil hacer una buena película con personajes agrupados entre "buenos" y "malos" y mucho me temo que tanto José Luis Garci como José Luis Cuerda se han situado en el mismo pantano...

viernes, 26 de septiembre de 2008

Sir Charles Chaplin en Caixa-Forum

El otro día peregriné a Caixa-Forum. Había que ver la exposición dedicada a Charlot... (¿debería decir Chaplin?) aunque el genial humorista no sea santo de mi devoción cinematográfica, porque fue uno de los responsables más señeros del Star-System, ese modelo cinematográfico concebido para garantizar el éxito comercial de cada película a partir de la popularidad de uno o varios actores... Muchos siguen hablando de las películas de Brad Pitt, de G. Clooney, etc. Y es notorio que mis criterios de calidad cinematográfica no se construyen sólo desde ese importante factor.
No obstante, reconozco que a mí también me divierten casi todas sus películas; con algunas secuencias estallo a reír como un chiquillo; con otras me emociono; con otras... Aunque sea políticamente incorrecto decirlo, confieso que El Gran Dictador no me parece, precisamente, una “obra maestra”; acaso una interesante película por sus componentes “pedagógicos”; tampoco creo que sea una buena película Tiempos Modernos y, como tantos otros, entiendo que La Condesa de Hong Kong es un “petardo infumable”, de la que no se salvan ni el argumento ni el guión ni la dirección ni el montaje... nada.
Hechas estas salvedades, si permanecemos en las estepas del cine de entretenimiento, Sir Charles Chaplin aparece como un “artista” (en sentido popular) excepcional, que fue capaz de crear uno de los “iconos” emblemáticos más importantes y movilizadores del siglo XX. Si unimos a ello su ejemplar disposición frente a los problemas sociales y una carrera interpretativa excepcional, se comprenderá que aún perviva un ambiente tan favorable hacia él y su legado.
¿Una exposición en Caixa-Forum dedicada a Chaplin? Desde el interés de la promoción que persigue el banco catalán... acierto absoluto (en otros textos he comentado la estrategia que La Caixa viene desarrollando en Madrid); desde un interés algo más ambicioso, cuando es tan fácil acceder a toda su filmografía... acaso sea más fructífero hacerse con una buena colección de sus películas y verlas con calma. Lo mejor: la colección fotográfica y, como de costumbre, el montaje de la exposición, que ha sido realizado según criterios escenográficos eficaces... Quienes acudan a visitarla pasarán un rato muy agradable… Garantizado.